Analizando la serie histórica de entradas anuales de españoles en Brasil observamos que, durante el período comprendido entre 1884 y 2001, ingresaron en Brasil en torno de 709.000 españoles.

El análisis de los datos contenidos en la de la mencionada serie histórica nos permite concluir que los grandes flujos migratorios españoles hacia Brasil están polarizados en torno a tres ciclos históricos, referidos cada uno de ellos a una década. Así, el primer ciclo cubre el final del siglo XIX, la década de 1889 a 1899, cuando ingresaron en Brasil 174.005 españoles. Es la época de la regencia de Dª Mª Cristina y de la guerra de Cuba, lo que quizás pudo tener repercusiones sobre el fenómeno migratorio. El segundo ciclo cubre la década de 1904 a 1914, con un total de 243.617 españoles emigrados a Brasil. Coincide con la primera pre-guerra europea y las agitaciones sociales en España (semana trágica, campañas de Marruecos, etc.). Finalmente, el tercer ciclo migratorio cubre la década de 1951 a 1961, con un total de 105.843 emigrantes, claramente inferior a los dos anteriores. Son los años de la post-guerra y el flujo de españoles a varios países, sobre todo iberoamericanos, es importante.

A partir de 1961 el número de emigrantes españoles con destino a Brasil comienza a caer progresivamente y en los últimos años es inexpresivo.
Como peculiaridad de la emigración española en Brasil observamos que durante la década 1936-1946 se contemplan los menores índices migratorios de toda la serie histórica que abarca desde 1884 a 2001. Esto nos permite pensar que son muy pocos los españoles que entraron en Brasil por motivos políticos, como consecuencia de la guerra civil española. La mayor parte de los españoles que abandonaron su patria por motivos políticos en este período se dirigió a Argentina, Chile, Uruguay o Méjico, donde encontraron unos regímenes políticos más favorables a su acogida (en Brasil gobernaba el “Estado Novo” de Getulio Vargas), además del mismo idioma.

A partir de la segunda mitad de la década de los noventa y como consecuencia de las inversiones españolas en Brasil, se ha producido un flujo de ejecutivos de sus empresas a las filiales brasileñas; siendo su perfil de formación universitaria, elevado nivel de ingresos, alta cualificación profesional y con residencia temporal que no se extiende más allá de los cinco años.

A partir de 2010, la crisis económica que elevó en España el nivel de desempleo y el aumento de la demanda de mano de obra especializada por parte brasileña, incentivada por el buen desempeño de su economía y por la celebración de grandes eventos del rango del Campeonato Mundial de Fútbol, en 2014, y las Olimpiadas, en 2016, ha despertado el interés de la mano de obra española por el mercado de trabajo brasileño.

En Brasil existen 5 circunscripciones consulares españolas: Brasilia, São Paulo, Río de Janeiro, Salvador y Porto Alegre. Según datos consulares, referidos al 31 de diciembre de 2013, existían 121.688 españoles inscritos en sus registros. En este contingente podemos destacar dos grupos: el constituido por emigrantes propiamente dichos que, según un estudio realizado en 2003 por la Fundación Getúlio Vargas, con datos procedentes del último censo demográfico, que data del año 2000, su número asciende a 43.064 personas y un segundo grupo, integrado por hijos y nietos de aquellos que poseen la nacionalidad brasileña, por haber nacido aquí y también la española por haber sido inscritos por sus progenitores en los registros consulares españoles.

La distribución por demarcaciones consulares es la siguiente: 

A continuación se expone la distribución por sexo de los españoles inscritos en 2013:

El cuadro siguiente recoge la evolución de la población española inscrita durante los últimos 3 años.

Inscritos en trienio 2011 -2013

En diciembre de 2013  había 102.602 españoles inscritos en el Censo de Españoles Residentes Ausentes –CERA- y su distribución, por circunscripciones consulares, era la siguiente 

 En cuanto al origen regional de la comunidad española, podemos establecer unas estimaciones porcentuales basadas en la experiencia de nuestros Consulados, esta Consejería y Secciones de Trabajo que nos llevan a los siguientes datos:

- Gallegos.................................................................. 65%
- Catalanes y valencianos........................................... 15%
- Andaluces............................................................... 10%
- Asturianos, castellanos y otras regiones.................... 10%

Esta distribución no es uniforme en el territorio brasileño, pues la concentración por lugares es muy acusada. Así en Salvador (Bahia), el 95% es gallego y más concretamente de la provincia de Pontevedra. En Río de Janeiro existe una mayoría muy acusada de origen gallego que podemos cifrar en 90%. En São Paulo es donde existe mayor variedad regional, con un componente bastante elevado de catalanes y valencianos, aunque el origen gallego sigue siendo mayoritario.

La actividad laboral desarrollada por nuestra colectividad se centra fundamentalmente en el sector de servicios, especialmente en las áreas de restauración, hostelería y alimentación. En São Paulo y Río de Janeiro gran número de hoteles y restaurantes están regentados por españoles.