02/03/2015 - La Rioja.com
El volumen de fraude descubierto en España por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y por la Inspección de Trabajo y Seguridad Social superó los 257 millones de euros en las operaciones llevadas a cabo en el 2014, según los últimos datos proporcionados por el Ministerio de Empleo.
En concreto, la Policía y la Guardia Civil detuvieron e imputaron durante el 2014 a 4.631 personas en 46.304 investigaciones realizadas en materia de fraude a la Seguridad Social, lo que supone un aumento del 7,4 por ciento respecto al 2013. Además, fruto del trabajo conjunto de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, se detectaron 9.822 infracciones, lo que significa un incremento del 16,8% respecto al 2013.
En Logroño estuvo recientemente Rafael Martínez Mesas, Subdirector General para la coordinación en materia de relaciones laborales, prevención de riesgos laborales y medidas de igualdad de la Dirección General de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, Ministerio de Empleo y Seguridad Social. Su objetivo principal fue reconocer ante el auditorio congregado en el IRSAL las nuevas modalidades de contratación, la importancia de la inspección y los resultados obtenidos hasta el momento.
¿Cómo actúa la Inspección de Trabajo?
Es positivo que las empresas sepan a través de sus asesores de qué manera la Administración está controlando muchas cuestiones relativas a materias de contratación, que afectan de manera importante a la vida de las personas, como son la contratación temporal y la transformación de estos contratos en indefinidos. Es muy importante la función inspectora porque nosotros visitamos, nosotros preguntamos y nosotros vemos con nuestros ojos y escuchamos con nuestros oídos. Somos una Administración cercana que al final comprueba que todos y cada uno de los supuestos casos cumplen con la normativa. Por eso los trabajadores deben saber que todas esas modalidades de incumplimiento se van a verificar por la acción directa de la inspección.
¿De qué punto partimos en esta materia de tanta importancia para los trabajadores y los empresarios?
Arrancamos reconociendo que la relación laboral está muy tutelada por parte de la Administración. Está muy intervenida y fiscalizada para compensar el desnivel que existe entre las dos partes, de ahí el intervencionismo de la Administración. Y no me cansaré de repetirlo todas las veces que haga falta: el contrato indefinido es el contrato por antonomasia, es el contrato que debe de ser, y que cualquier otro tipo de contrato será la excepción a esta regla que vendrá motivada por una causa, que vamos a controlar. Así que el contrato indefinido es la norma general y el resto es la excepcional.
¿Hay fraude en la contratación?
El Estatuto de los Trabajadores sienta la regla de las diversas modalidades pero dejando claro que el contrato indefinido es la norma común. Ha habido una serie de reales decretos con los que el legislador ha pretendido dar estabilidad al empleo y al observar que ha habido un exceso de fraude en la contratación temporal se han ido incluyendo una serie de medidas sucesivas para, por un lado, modificar la legislación, y por otro, encomendar a la Inspección una actuación preferente e insistente sobre el fraude en la contratación. Últimamente hemos hablado del fraude, por la no afiliación y alta, que sigue siendo una labor prioritaria de la inspección. Pero ahora tenemos que decir que al mismo tiempo se está produciendo un fraude en la contratación por el uso indebido de las modalidades contractuales.
¿Y la situación de los contratos temporales?
Existen causas típicas de temporalidad, y nosotros perseguimos el fraude cuando se recurre a la temporalidad sin concurrir las causas que lo justifican. Nosotros como inspección vamos a perseguir sobre todo el fraude en la contratación, sobre todo de fondo, aunque sin olvidarnos de la forma.