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El informe elaborado por la Inspección Trabajo sobre el accidente laboral de la A-7 en noviembre de 2005 en Almuñécar (Granada), que costó la vida a seis trabajadores, concluye que "se omitieron trabajos de mantenimiento y revisión de la autocimbra" que se desplomó y originó el siniestro.

 

"Las exigencias constructivas de seguridad de la autocimbra estaban garantizadas, certificada su aptitud para la construcción de los viaductos de la Autovía del Mediterráneo y constada su fiabilidad estructural", según el documento, al que ha tenido acceso Europa Press.

 

De hecho, se revisó de forma adecuada el montaje y funcionamiento de la máquina, riesgo y medidas preventivas, pero no después de las operaciones de puesta en marcha inicial, montaje, traslado y avance. No se realizó porque "constaría en los correspondientes 'chek-list", según el documento que adelanta hoy el diario 'La Opinión de Granada'.

 

Tampoco queda acreditada, consta en el informe, "la revisión de las uniones atornilladas respecto al avance de la autocimbra del día del accidente, el 7 de noviembre de 2005", fecha en la que, de confirmarse las hipótesis establecidas hasta ahora, la estructura estaría "debilitada o deteriorada" sin que "los procedimientos de inspección de aquellas hayan sido suficientes para detectar el estado".

 

Puesto que las anteriores sí se realizaron, los días 5 y 6, según declararon algunos trabajadores citados por la Inspección para elaborar el referido informe, tal consideración "deja abierta la puerta a la hipótesis de que fuese el aflojamiento o falta de apriete de la tuerca de uno o varios tornillos lo que provocara el colapso".

 

Por lo tanto, la revisión de las uniones atornilladas, cuyo apriete se hacía con llave de golpeo, no se hizo en cada uno de los avances realizados, además de no constatar en los trabajos preventivos que la cimbra habría sufrido "rotura de determinadas soldaduras" y estaría la estructura "debilitada".

 

El coordinador de seguridad de la contratista principal, UTE La Herradura, advirtió de la necesidad de llevar a cabo revisiones en el funcionamiento de la cimbra, que la empresa no siguió o no consta que lo hiciera. El manual de instrucciones de la maquinaria también reflejaba la obligatoriedad de "revisar las soldaduras y uniones atornilladas" después de cada avance, además de en el montaje y traslado.

 

INFRACCION DE FOMENTO

 

Según el informe, con independencia del accidente de la A-7, aunque no se hubiese producido, la Inspección constata que el Estudio de Seguridad y Salud elaborado por el Ministerio de Fomento es "insuficiente" al "no contemplar los equipos de trabajo utilizables en la obra --autocimbras, grúas, vehículos de hormigonado, volquetes, etc.-- lo que supone un incumplimiento" de la normativa legal.

 

En concreto, le correspondía la elaboración del Estudio de Seguridad y Salud, el nombramiento del coordinador de seguridad y el aseguramiento de que éste cumple sus deberes.

 

La empresa responsable de la autocimbra, EMP, "tampoco llevó a cabo acciones de supervisión y control respecto de las operaciones de inspección o revisión de la autocimbra que llevaban a cabo los operarios responsables de ello". Asimismo, el plan de seguridad elaborado por la UTE La Herradura, contratista principal, "carece decualquier indicación sobre planes programas de mantenimiento y revisión de la autocimbra".

 

CAUSAS DEL ACCIDENTE

 

El informe se basa en los documentos de la Comisión Técnica de Investigación del Ministerio de Fomento y el Informe de Actividades, Análisis de Riesgos y Conclusiones elaborado por los peritos judiciales que consideraron como la causa "más probable" del accidente la rotura de una pieza.

 

En concreto, a la "rotura del marco trasero de la batería izquierda de la cimbra" que pudo deberse a la rotura de una soldadura o al aflojamiento de tornillos.

 

El Ministerio de Fomento adjudicó las obras a la UTE La Herradura, que a su vez subcontrató a Estructuras y Montajes Prefabricados, quien encomendó parte del trabajo a Douro Montemuro.