Existen dos formas distintas de emprender un negocio:

  • Como empresa individual: Empresa unipersonal, donde no hay separación entre los activos asignados a la actividad empresarial y los activos privados del empresario.

Por tanto, el empresario responde con todos sus bienes de los compromisos de su empresa. Esto no está exento de riesgos, por ejemplo, en caso de quiebra de un cliente importante. El riesgo que corre la vivienda de un autónomo se ha reducido un poco gracias a una medida que le permite proteger su vivienda declarándola inembargable en determinadas circunstancias. La protección se aplica únicamente a la residencia principal del autónomo, es decir, el lugar donde vive la mayor parte del año, y previa declaración de inembargabilidad.

  • Mediante la creación de una sociedad: La sociedad puede ser de responsabilidad limitada (el socio responde de las deudas de la empresa solo hasta el importe de su aportación), o bien de responsabilidad ilimitada (los socios, excepto los comanditarios, pignoran sus propios bienes como garantía de las deudas que pueda contraer la sociedad).

Toda la información para establecerse de una u otra forma en Bélgica.

La información sobre fiscalidad de las empresas.

Puedes contactar además con la Consejería de la Oficina Económica y Comercial de España en Bélgica.

Puedes consultar el Programa de la Cámara Oficial de Comercio de España en Bélgica EmprendeBELUX donde se encuentran guías para emprendedores.