La formación profesional en Polonia se inicia una vez finalizado el periodo que comprende la educación primaria y el primer grado de secundaria (8º curso szkoła podstawowa), pudiéndose optar por la formación en una:
Una vez finalizada la escuela técnica superior y el segundo grado de formación profesional se puede pasar directamente a la educación superior.
La formación profesional tiene un componente teórico y uno práctico, basado en un plan de estudios elaborado por las escuelas, que, entre otros, determina el tipo y número de horas de aprendizaje en la empresa. También debe contener una descripción de las habilidades que el estudiante debe aprender, recomendaciones sobre equipos didácticos, condiciones para el aprendizaje y su duración.
Por lo general, las escuelas contactan con las empresas, pero cada vez más a menudo son las empresas las que se dirigen a las escuelas profesionales (en particular las grandes empresas tienen problemas para encontrar candidatos adecuadamente cualificados) y proponen la colaboración. El empresario está obligado a disponer de instructores cualificados para dar clases prácticas. La escuela cubre los gastos del seguro de accidentes de los alumnos.
La Formación profesional para el empleo juvenil (przygotowanie zawodowe młodocianych pracowników) está dirigida a jóvenes (15-18 años) con educación primaria o secundaria básica. Se basa en un contrato laboral entre alumno y empresa. Cuando se trata de clases teóricas en la escuela, la empresa y la escuela acuerdan el alcance y la organización de los contenidos en un anexo al contrato. Cuando la formación tiene lugar en la empresa, el joven tiene estatus de trabajador y en la escuela, de alumno.
Durante el periodo de aprendizaje el trabajador joven percibe un salario (4-6% del salario medio), tiene derecho a seguridad social y a vacaciones. La formación suele tener lugar en pymes, en particular en el sector de los oficios.
Existen las siguientes modalidades de empleo juvenil: