Entrevista realizada en junio de 2020
Rosa tuvo su primera experiencia en Alemania cuando decidió irse de Au pair a Braunschweig, cerca de Hannover, después de la selectividad. Tras ese año aprendiendo alemán regresó a España donde comenzó a estudiar Traducción e Interpretación en la Universidad de Salamanca.
A los 21 años decidió volver a Alemania, el país que tan bien la había acogido y cuya cultura siempre la ha fascinado. Trasladó su expediente académico y se mudó a Heidelberg, donde terminó la carrera. Desde entonces vive en la región Rhein-Neckar.
Cuéntanos un poco quién eres y a qué te dedicas actualmente en Alemania.
Soy una apasionada de los idiomas que tiene la suerte de poder dedicarse a lo que le gusta, que es traducir e interpretar.
Tienes experiencia aquí como alumna y como profesora. ¿Cuáles son los principales atractivos del sistema educativo alemán?
Para mí una de las principales ventajas de la educación superior en Alemania es la flexibilidad en cuanto a los programas de estudio y los horarios. Los universitarios españoles se matriculan de asignaturas concretas y pagan según la cantidad de créditos elegidos. En Alemania es diferente: cada estudiante abona una “tarifa plana” una vez por semestre (donde yo estudié eran aproximadamente 150 €) y es libre de asistir a las clases que quiera. De este modo se fomenta también la formación interdisciplinar, ya que se puede asistir a clases de otras facultades.
Otro aspecto destacable es la facilidad para compaginar las clases con trabajos a tiempo parcial. De hecho, muchas empresas ofrecen puestos específicos para personas que todavía están estudiando (Werkstudenten), una iniciativa que me parece excelente. Aparte de ayudarles a obtener independencia económica, este tipo de contratos permiten a los jóvenes ganar experiencia, preparándolos así para enfrentarse al mercado laboral una vez terminen la carrera.
Cuéntanos una experiencia profesional que te haya marcado desde que llegaste a Alemania.
Sin duda elegiría la primera traducción que realicé por encargo. El primer cliente nunca se olvida.
¿Cómo reaccionó tu entorno, familia y amigos, cuando decidiste venir a Alemania?
La primera vez que vine a vivir aquí fue en 2009, y aunque era muy joven me apoyaron porque estaban convencidos de que aprender alemán e irme “a la aventura” me servirían de cara al futuro. Recordemos que por aquel entonces la palabra “crisis” era nuestro pan de cada día. La segunda vez que me mudé a Alemania fue en 2012 tras ser admitida en la Universidad de Heidelberg. Imagino que por un lado sintieron orgullo por verme lograr uno de mis objetivos pero por otro cierta tristeza, pues sabían que esta mudanza tendría un carácter más definitivo.
¿Cuáles han sido las mayores dificultades en la integración laboral en Alemania? ¿Tuviste dificultades para convalidar tus estudios? ¿Alguna fuente que te sirvió en tu desarrollo profesional?
Sinceramente, mi mayor obstáculo laboral han sido mis propias inseguridades. Al principio no podía evitar pensar cosas como que mi acento podría hacerme parecer menos profesional. Por suerte el tiempo me ha demostrado que no es así: lo importante es trabajar bien, y que se note. El esfuerzo es el verdadero elemento diferenciador. Todo lo demás es secundario.
En España solo había cursado los primeros dos cursos del Grado, así que lo único que pude conseguir es que me reconocieran algunos de los créditos que había hecho en Salamanca. No fue posible convalidarlo todo y tuve que repetir unas cuantas asignaturas que ya había cursado, pero pese a todo mereció la pena, pues pude mejorar mi alemán a pasos agigantados.
Toda tu carrera profesional se ha desarrollado aquí ¿Qué has aprendido trabajando aquí que te gustaría trasladar a España?
Lo que desearía trasladar es la idea de que los jóvenes sin experiencia son diamantes en bruto. A veces en España se tiende a verlos como una carga, cuando en realidad son una inversión de futuro. El esfuerzo es un pilar fundamental en la vida, pero para llegar realmente lejos también es necesario dar con personas que apuesten por ti y te permitan crecer profesionalmente, sobre todo en los comienzos. Yo en Alemania he tenido esa suerte, y por ello les pido que se lo piensen siempre dos veces antes de tirar ese currículum con tanto espacio en blanco a la papelera. No saben qué potencial podría esconderse detrás. Atrévanse a dar una oportunidad.
¿Tienes planeado volver algún día a España o mudarte a otro país?
De momento no. Siempre llevaré mis orígenes en el corazón, pero las raíces que he echado aquí también son muy profundas. A día de hoy soy muy feliz en Alemania. El tiempo ya dirá lo demás.
¿Tienes relación con otros profesionales españoles en Alemania? ¿Verías útil que hubiese una red estable de networking entre profesionales españoles que tengan Alemania como nexo en común?
Conozco a muchos compañeros de oficio, pero tengo pocos contactos más allá de mi gremio. Me encantaría que se fomentara la participación y estaría más que dispuesta a unirme a una iniciativa así. ¡Cuenten conmigo!
¿Cómo estás viviendo la crisis actual a nivel personal y profesional? ¿De qué manera crees que esta situación que estamos viviendo te va a afectar en el futuro?
A nivel personal lo más duro es no saber cuándo planear mi próxima estancia en España. Tengo muchas ganas de abrazar a mi familia y a mis amigos de allí. En el terreno laboral la crisis nos ha afectado mucho a los intérpretes de conferencias, ya que se han cancelado todos los eventos. De momento no he notado un descenso de encargos de traducción, así que crucemos los dedos para que la situación no empeore.
¡Muchas gracias por tu tiempo!
Gracias por el interés.
Esta entrevista forma parte de una serie de entrevistas a profesionales españoles en Alemania. Si quieres ser entrevistado o conoces a algún otro español que crees pueda aportar a esta sección, no dudes en escribirnos a alemania@mites.gob.es.