En Dinamarca debes pagar impuestos desde el momento en que recibas ingresos derivados de tu trabajo, independientemente de que tu trabajo sea fijo o temporal y de la duración del mismo. Lo más habitual, es que el empresario para el que trabajes realice el oportuno ingreso en la Hacienda danesa. Debes analizar tu nómina para comprobar si lo que el empresario deduce de tu nómina para pagar a Hacienda es la cantidad correcta.
Entre Dinamarca y España no existe un Tratado para evitar la doble imposición desde el año 2009. Por esta razón, ambos países pueden exigirte el pago de impuestos. Si has decidido volver a España y has pagado impuestos en Dinamarca, te interesa leer la información que ofrece la Agencia Tributaria.
Por otro lado, resultará bastante habitual que la Hacienda danesa se ponga en contacto contigo una vez que hayas retornado a España para regularizar tu situación fiscal. Por ello es conveniente que, antes de retornar, aclares con tu empresa en Dinamarca y con la propia Hacienda danesa las cantidades que debes pagar o, en su caso, reclamar.