ES ECONOMÍA SOCIAL

Tanto la banca cooperativa como la banca ética representan modelos financieros alternativos que ponen el foco en la sostenibilidad, la equidad y el desarrollo local, diferenciándose de la banca tradicional, cuyo objetivo principal es la rentabilidad de sus accionistas. Estos modelos juegan un papel clave en la inclusión financiera y la estabilidad económica, fortaleciendo la economía social y promoviendo un sistema financiero más responsable y orientado al bien común.

COOPERATIVAS DE CRÉDITO

Una cooperativa de crédito es una sociedad cooperativa cuyo objeto social es servir a las necesidades financieras de sus socios y terceros mediante el ejercicio de las actividades propias de las entidades de crédito, con un número de socios ilimitado, cuya responsabilidad por las deudas sociales alcanza el valor de sus aportaciones.

A su vez, se subdividen en cajas rurales, cajas profesionales y cajas laborales, según su origen y el propósito de su constitución, con el objetivo de atender las necesidades específicas de distintos colectivos.

Su regulación está establecida en la Ley 13/1989, de 26 de mayo, de Cooperativas de Crédito. 

FINANZAS ÉTICAS

Hay dos tipos de entidades financieras éticas:

  • Bancos éticos: Son entidades financieras con ficha bancaria que operan como intermediarios financieros, ofreciendo servicios como captación de ahorro y concesión de crédito. Su actividad está dirigida a la ciudadanía, organizaciones de la economía social y solidaria y empresas de impacto, garantizando que sus operaciones se alineen con principios de sostenibilidad y responsabilidad social.
  • Entidades financieras éticas no bancarias: Son organizaciones que, sin disponer de ficha bancaria, prestan financiación a sus socios, entidades del tercer sector, organizaciones de la economía social y solidaria y personas en riesgo de exclusión financiera. Utilizan recursos propios y aportaciones de sus socios y organizaciones asociadas, asegurando que el capital gestionado se destine a proyectos con impacto positivo en la sociedad.

 

La banca cooperativa y la banca ética se diferencian de la banca tradicional en su enfoque, propiedad y objetivos. Mientras que la banca convencional prioriza la rentabilidad y los intereses de los accionistas, los modelos cooperativos y éticos se centran en la comunidad y el bienestar social.

Estructura y toma de decisiones:

  • En la banca cooperativa, los clientes son también propietarios y participan activamente en la toma de decisiones mediante un sistema democrático.
  • En la banca ética, aunque pueda adoptar diferentes estructuras legales, generalmente tiene un modelo de gobernanza participativa que garantiza su alineación con valores sociales y ambientales.
  • En la banca tradicional, las decisiones las toman directivos que responden principalmente a los intereses de los accionistas, buscando maximizar beneficios.

Enfoque y objetivos:

  • Los bancos cooperativos reinvierten sus beneficios en la comunidad o en mejorar los servicios a sus socios.

  • Los bancos éticos aplican criterios de exclusión a sectores como la industria armamentística y priorizan inversiones en sostenibilidad, cooperación y desarrollo social.

  • La banca tradicional, en cambio, tiene una visión más global y orientada a la maximización de beneficios, sin una vinculación específica con el desarrollo comunitario.

Relación con los clientes e inclusión financiera:

  • La banca cooperativa y la banca ética fomentan una relación más cercana con los clientes y buscan garantizar la inclusión financiera, extendiendo sus servicios a zonas rurales y colectivos con menos acceso al sistema bancario.
  • La banca tradicional suele priorizar la eficiencia operativa sobre la personalización del servicio.

Gestión del riesgo y estabilidad:

  • Los bancos cooperativos, a pesar de destinar un mayor porcentaje de inversiones a activos de riesgo como préstamos a hogares y empresas, suelen ser más estables en tiempos de crisis gracias a su enfoque de largo plazo y su conocimiento del cliente.
  • La banca ética, por su parte, mantiene estrategias prudentes de inversión en sectores con impacto social positivo, minimizando su exposición a la especulación.
  • La banca tradicional, aunque eficiente en sus operaciones, puede verse más afectada por la volatilidad de los mercados debido a su búsqueda de altos rendimientos.

Relación entre las finanzas cooperativas y las finanzas éticas:

Las finanzas cooperativas y éticas comparten la vocación de servicio a la comunidad y la economía social, aunque sus enfoques pueden diferir en su alcance. Mientras que las entidades de finanzas éticas priorizan inversiones alineadas con su misión fundacional y sus principios de sostenibilidad, las cooperativas de crédito ofrecen una cartera de financiación más amplia, destinada a atender a toda la comunidad y sus diferentes sectores productivos.

La Red de Finanzas Alternativas y Solidarias (REFAS) es una organización que agrupa a diversas entidades comprometidas con las finanzas éticas y solidarias en España. Actualmente, está integrada por 17 entidades dedicadas a promover la inclusión financiera y el desarrollo de una economía más justa y sostenible.

Fundada en 2015, su principal objetivo es coordinar el circuito de finanzas locales alternativas y solidarias, explorando tanto las posibilidades como los límites de la actividad parabancaria dentro del marco de las finanzas éticas, y fomentando su vinculación y sinergia con otras iniciativas afines.

REFAS reúne entidades no bancarias que operan en la intermediación financiera a pequeña escala. Todas ellas comparten plenamente los principios de las finanzas éticas y adoptan la forma jurídica de fundación o asociación.

La Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (UNACC) es la principal asociación del sector de cooperativas de crédito en España. Fundada en 1970, actualmente agrupa a 42 cooperativas de crédito.

Su misión es defender, promover y fortalecer el modelo cooperativo de crédito, así como los valores que rigen su actividad en el sector financiero.

Su visión es generar valor a partir de la esencia y las particularidades del cooperativismo de crédito, fomentando su desarrollo y sostenibilidad.

La Federación Europea de Bancos Éticos y Alternativos (FEBEA), fundada en 2001 en Bruselas y con presencia en 17 países europeos, es una organización internacional sin ánimo de lucro que reúne a instituciones financieras comprometidas con el desarrollo de las finanzas éticas y alternativas en Europa.

FEBEA tiene como propósito impulsar y consolidar modelos financieros basados en principios de transparencia, equidad y responsabilidad social, asegurando que la economía esté al servicio de la ciudadanía. Su labor se centra en promover las finanzas éticas y solidarias, fortaleciendo iniciativas que prioricen el impacto social y ambiental positivo.

Asimismo, fomenta el apoyo a proyectos sostenibles, canalizando financiación hacia iniciativas que contribuyan al desarrollo económico inclusivo, la cohesión social y la innovación en ámbitos sociales y medioambientales, garantizando un crecimiento equitativo y sostenible.

En el ámbito de la difusión y promoción de las finanzas éticas, destaca el papel de Financiación Ética y Solidaria (FETS). Esta asociación, fundada en 1999, tiene como objetivo impulsar el desarrollo de las finanzas éticas y solidarias, agrupando entidades de la economía social y solidaria, así como del ámbito financiero cooperativo, la acción social, la educación y la solidaridad internacional.

Además, cuenta con un Observatorio, un espacio de encuentro promovido y coordinado por FETS, donde participan diversas entidades vinculadas a las finanzas éticas y la economía social. En este espacio se analiza la situación del sistema financiero ético y su impacto en la realidad socioeconómica actual.